top of page

La instrucción directa Vs el Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP)

Por: Humberto Portocarrero



Solo hace falta abrir los ojos para darse cuenta de que el mundo ha dado saltos agigantados transformándose cada vez de manera más rápida, es que día a día los nuevos escenarios en los que nos toca aprender, comunicarnos, trabajar y realizar hasta las más sencillas actividades que tenemos, son otros y estos nos exigen una cada vez más alta capacidad de adaptabilidad.

Es así como dentro del ámbito educativo desde hace tiempo atrás el reflexionar sobre los procesos de enseñanza aprendizaje es una prioridad, lamentablemente mucho de esto ha quedado relegado y muchas de las escuelas se encuentran en un siglo XXI, pero aplicando metodologías del siglo XIX.

Muchas de las escuelas aún mantienen dentro de sus aulas una instrucción directa, como elemento central de una enseñanza pasiva, done de da una trasmisión lineal del conocimiento, fomentando en el estudiante la reproducción del conocimiento de manera acrítica y memorística. Esta forma de trabajo demanda una menor planificación y carga laboral del profesor, puesto que no atiende la diferencia presente en el aula y centra en el docente el proceso educativo, dejando un margen de acción y reflexión mínimo en cada uno de los estudiantes.

Foto de Erik Mclean en Pexels


Mientras tanto, en otras escuelas se trabaja centrando la práctica pedagógica en una enseñanza activa, donde las habilidades, destrezas, actitudes y competencias son extremadamente relevantes para concretar el proceso de enseñanza aprendizaje, que por cierto, tiene la característica principal de estar centrada en el alumno, dejando para la enseñanza un porcentaje de la ejecución curricular no tan significativo comparado con el porcentaje de la ejecución curricular destinado para el aprendizaje. El estudiante se empodera y se convierte en un verdadero protagonista de su aprendizaje. El rol del profesor pasa a ser el de un guía y creador de experiencias y oportunidades de aprendizaje. Esta forma de trabajo demanda una planificación y carga laboral más alta para el profesor, pero la misma es capaz de motivar a cada uno de los estudiantes, atendiendo sus intereses y la diferencia que se tiene en el aula, entregando una posibilidad elevada de reflexión sobre el proceso de aprendizaje individual y colaborativo.


El contextualizar los enfoques pedagógicos, metodologías, métodos y didácticas en las escuelas es imprescindible, mucho más ahora que la adquisición de habilidades trasferibles es una elevada necesidad. La responsabilidad de las escuelas es extremadamente alta, pero no debemos olvidar que la educación es un derecho, pero al mismo tiempo es una responsabilidad de todos.


 
 
 

Comments


bottom of page